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DECORACIÓN


¿Te gusta la decoración? ¿Te apetece cambiar la apariencia de tu casa pero no tienes muy claro lo que buscas?
Para todos aquellos apasionados de la decoración de su hogar, Muralyart ofrece este espacio en el que hablaremos de estilos decorativos y te daremos ideas prácticas para que tu vivienda se convierta en una casa de revista gracias a la pintura mural.
Cuando hablamos de estilo nos referimos a una forma particular de ambientar un espacio, una expresión distintiva.
Son muchos los elementos que con su presencia o ausencia van creando un estilo: formas, colores, composición, materiales…
En la actualidad los estilos decorativos  se reinterpretan y cambian de forma permanente. Los estilos ya no se aferran a una época o región, todo puede estar a la moda si se combina de una manera acertada.
Por eso cada vez es más difícil poder clasificar con claridad las vanguardias estilísticas en cuanto a decoración e interiorismo.

En Muralyart te echamos una mano. A continuación te ofrecemos una pequeña clasificación de los estilos decorativos presentes en el interiorismo actual. Identifica el tuyo y busca en nuestros diseños las propuestas que Muralyart te ofrece para que tu espacio sea único. Cada semana iremos subiendo nuevos diseños para que puedas elegir el tuyo.

Estilo Rústico
Se destaca por el uso de materiales nobles y naturales poco tratados, como la madera, el mimbre o la esterilla. También se da importancia a las artesanías y a las telas gruesas en colores claros. Puede ser un estilo sencillo o sofisticado, evitando los ambientes sobrecargados.
El empleo de aperos de labranza como elementos decorativos otorga clase a este estilo. La clave es evocar el ambiente casero de antaño incorporando algún elemento de modernidad.

Para evitar caer en lo “arcaico”, aportaríamos frescura a la estancia con un mural de temática rústica, como pueda ser un bodegón, pero en clave moderna, rompiendo convencionalismos. 


Shabby Chic
Estilo de origen británico que une la elegancia y el porte del pasado con lo más desaliñado de la actualidad decorativa. El shabby chic se caracteriza por objetos y muebles de corte antiguo pero actualizado.
El blanco es su caballo de batalla. Los tonos pastel y las formas ornamentales orgánicas son los complementos ideales. Flores, velas, cojines con estampados diversos, lámparas de araña modernas…todo son elementos esenciales para este estilo femenino a la vez que desenfadado.

Murales simulando la técnica del decoupage, con aplicaciones en pan de plata y motivos orgánicos amables son una apuesta segura para este estilo.

Estilo Nórdico
Si eres un apasionado de Ikea, ¡éste es tu estilo!
Es el estilo triunfador en los últimos años. Mezcla minimalismo y estilos industriales. Es un estilo joven y vital que genera estancias muy prácticas para la vida diaria que no abandonan la parte decorativa.
Son espacios luminosos, sencillos y modernos. Se suele optar por colores claros tanto en paredes como mobiliario, poniendo la chispa de color en adornos y tejidos. Por ello suelen ser espacios con mucha personalidad.
Precisamente por esta razón, es el tipo de estilo que encaja con prácticamente todo tipo de pintura mural.

Desde murales muy sencillos con motivos florales, pasando por otros más sofisticados o bien murales divertidos llenos de color.

Estilo colonial
El estilo colonial nos remonta a las haciendas y casas señoriales de las colonias europeas situadas al otro lado del Atlántico, aunque también cuenta con cierta influencia oriental.
El espíritu de un mobiliario artesanal de madera con acabados de ceras naturales es el sello que identifica este estilo.
Predominan los tonos tierra que dan calidez a la estancia. La modernidad tiene su hueco en este estilo con detalles de acero y forja. 
Tejidos naturales y alfombras de esterilla son un complemento apropiado. Es un estilo de belleza tranquila y líneas sosegadas.

En cuanto al toque artístico, un mural de tendencia mexicana o de motivos florales cerraría este espacio melancólico a la perfección. 

Estilo Oriental
Basado en una interpretación exótica y personal de esta cultura milenaria, con la simplicidad que aportan su sabiduría y filosofía. Partiendo del concepto del ying y yang como balance de energías, este estilo se define por el contraste de texturas, objetos místicos y la presencia de la naturaleza con flores y agua.
Predominan los colores suaves y cálidos (beige y tierras) combinados con una iluminación tenue. Camas muy bajas y armarios de puertas correderas componen el mobiliario perfecto.

Murales con motivos vegetales muy sencillos como unos bambús o unas ramas de almendro naciendo de la propia pared darían equilibrio natural al espacio.

Minimalismo 
En síntesis, la filosofía del minimalismo persigue construir cada espacio con el mínimo número de elementos posibles, de forma que se elimine o evite todo cuanto pueda resultar accesorio.
El minimalismo se caracteriza por la extrema simplicidad de sus formas, ambientes amplios y despojados, líneas puras y formas geométricas básicas, buscando el equilibrio y armonía desde la mínima expresión.
Todo debe ser serenidad y orden. Todos los elementos deben combinar y formar una unidad, priorizando el todo sobre las partes.

Las paredes piden fondos monocromáticos y neutros, predominando el color blanco. Un mural exclusivo de líneas abstractas y colores puros puede ser una buena combinación artística para este estilo.

Estilo Loft
La adaptación de locales industriales para vivienda, aprovechando así su estructura básica, generó este nuevo estilo. El loft se caracteriza por grandes superficies sin divisiones, con mucha luz y destacado aspecto fabril.
La estética fría e industrial era lo que lo caracterizaba. Sin embargo, actualmente se puede organizar un ambiente loft con mezclas de estilos, en ambientes más cálidos, con muebles y objetos de diseño. 
Es un estilo tranquilo y neutro donde el espacio vacío constituye el elemento más importante.
Permite detalles de obra a la vista (columnas, cañerías…) y la decoración suele realizarse con objetos plásticos o metálicos. La integración visual de todo ese gran espacio es de suma importancia, utilizando paredes, materiales y colores para lograr uniformidad.

Son viviendas de vanguardia y por ellos sus paredes solicitan murales muy modernos, atrevidos que dinamicen el espacio.

Kitsch
El kitsch se destaca por el predominio del color y las formas, la utilización de elementos antiestéticos y chillones. Es un estilo pretencioso en el que predominan los colores rosa chicle, azul cielo, verde manzana y rojo.
Apuesta por el brillo y elementos decorativos de todo tipo: pieles sintéticas, cristal, plástico y papel. Muebles de formas estrambóticas, accesorios disparatados y toda clase de objetos que tengan que ver con el arte y con este tipo de cultura. Utiliza también cortinas de caireles y almohadones de pelo. En definitiva, cualquier tipo de estampado u objeto que sea llamativo y original.

Si te gusta este estilo o quieres dar un toque “kitsch” a un espacio sobrio te proponemos pequeños murales simpáticos llenos de glamour.



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